el paraíso o el infierno como destino.
Dar una salida a la neurosis de fracaso.
Y dejar que el viento frió, toque mis brazos.
Morir para vivir.
Sepultar lo que daña mi alma y corazón.
Vertí el vino sobre mi piel, la metáfora de mi sangre.
La muerte de un amor insano, me ayuda a ser feliz.
No tengo ninguna queja, porque ya tengo mi perdón.
Y recupero el fuego de mis ojos con mi sonrisa de cristal.
Brillo naranja, ojos oscuros, boca rosa.
Aro penetrando mi nariz, liberando el miedo.
Su simbolismo es mi fuerza, mi libertad y mi vació mental.
Árbol herido
brota oro fluido.
Herida mutante...
Roca preciosa
del color de la energía
que transforma mi alegría
en un nuevo corazón.
Que bello!! un abrazo
ResponderEliminar