lunes, 3 de diciembre de 2012

Castillo






Refugiarme en ti, en tu piel, entre tus piernas...
tus brazos, tu pelo, tus labios, tus dedos, tus oídos.


En mis sueños color sepia, donde tu protagonizas 
mi sublime ilusión.



Eres tu mi delirio un fantasma que no olvido
el misterio incomprendido
la vida, la muerte, las tinieblas y el paraíso.


Eres tu, todo divino.
El rey de mis sueños, el dueño de mi corazón.


Escondeme donde nadie pueda encontrarme
en el lugar, que solo tu puedas encontrar.


Escondeme, mantenme ahí...
mantenme a salvo en ti.




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